El SEO es un término que en la actualidad va ligado estrechamente al marketing, especialmente al de contenidos. Si deseamos obtener visibilidad en los buscadores, es imprescindible dominar su funcionamiento y mantenerse actualizados, ya que los algoritmos varían con frecuencia.
En qué consiste el SEO
El SEO o Search Engine Optimization se traduce como la optimización de una página web para mejorar la posición que obtiene en los resultados de los buscadores. En otras palabras, lograr obtener los primeros puestos cuando alguien busca contenido relacionado con nuestra temática.
Sin embargo, podemos distinguir entre dos tipos de SEO: el On Page y el Off Page. El primero de ellos es la optimización que hacemos dentro de nuestra propia página. Esto es, podemos poner enlaces de unos artículos a otros para favorecer la navegación de las visitas que llegan. Eso sí, la mención debe ser coherente con el contenido del que se habla.
El SEO Off Page, por el contrario, es la optimización a partir de un sitio externo a nuestra página web. Es aquí donde entra el concepto del link building o construcción de enlaces. Para lograrlo intentaremos que otras páginas webs o blogs considerados relevantes en nuestro sector enlacen a nuestro sitio.
Claves para utilizar el SEO
Google utiliza diferentes algoritmos para posicionar las páginas que van variando cada cierto tiempo. La finalidad es beneficiar a aquellos sitios más humanos y con contenidos de mejor calidad. Para adecuarnos a ellos debemos tener en cuenta los siguientes aspectos:
Elige un buen hosting
Para poder obtener visitas y que vuelvan debemos contar con un hosting que no nos dé problemas. Si nuestra página falla, no carga o lo hace de forma incompleta, las visitas se irán y, probablemente, para no volver. Además, la velocidad de carga también es importante, ya que hoy en día la inmediatez prima por encima de todo.
Crea contenido de calidad y compártelo
Aunque no podemos controlar lo que hará nuestra audiencia, sí podemos controlar nuestra actividad. Para mejorar nuestro SEO debemos publicar contenidos originales y bien redactados. Para darles visibilidad, es importante poner enlaces a las redes sociales para favorecer el que sea compartido. Cuando más circule, más visitas.
Utiliza URLs sencillas
La URL que utilizamos en nuestro blog o página debe ser lo más simple posible y hacer referencia al contenido de la misma. Basta con incluir el propio título del artículo. Y hablando de títulos, estos también tienen mucho peso en el SEO.
Google se basa en ellos para establecer la relación con la búsqueda que ha hecho un usuario. Por lo tanto, debemos ser claros, directos y lo más originales posible. No conviene superar los 70 caracteres y la palabra clave deberá ir al principio.
Escribe una descripción
La descripción no suele tenerse muy en cuenta, sin embargo, es una explicación del contenido para quien está buscando información similar. El límite se alcanza con un par de frases, pero pueden ser suficientes para que alguien visite nuestra web y no otra.
Utiliza los encabezados
Los encabezados se representan como «Hx», siendo la x un número. Así, los h1 serán los títulos principales de los apartados de un texto, y a medida que avanzamos en los números, la importancia del contenido se va reduciendo o se va integrando dentro de los apartados o h anteriores.
Añade palabras clave
Como su nombre indica, son clave para el SEO. No obstante, los algoritmos cambian cada cierto tiempo y ya no vale con repetir palabras desenfrenadamente a lo largo de un texto. El exceso también se penaliza.